Entrevistas y artículos | Comentarios
ED Libros, 2016
En el Sanatorio nadie puede salir, a sus habitantes se les inocula en su voluntad la inacción y la aceptación de los males que asolan al Estado. Los callados, liderados por un grupo de pensadores inconformistas, deciden luchar contra la masa manipulada que encarna la homogeneización de las ideas, masa en la que impera el miedo a rebelarse y se denuncia al discrepante.
El Sanatorio como alegoría de una civilización enferma, derrotada, amedrentada por el dominio de poderes que han hecho de la acusación al otro su razón de ser. En esta utopía negativa, se nos coloca un espejo frente a nosotros en el que el lector reconoce de inmediato los males que aquejan al mundo. Denuncia de un mundo dominado por un nuevo autoritarismo insidioso, de baja intensidad, que promueve procesos de ruptura con la realidad mediante nuevas formas de exclusión, políticos falsarios y triunfo de las identidades colectivas sobre las individuales.
Novela de ideas y de furia en defensa de la república de las letras, en la que transitan las voces de Robert Walser, Marguerite Duras, Thomas Bernhard o Gustave Flaubert, entre otras. Voces que, siendo parte de nuestro legado, se nos muestran como demiurgos que nos hablan de nuestros males presentes y futuros.
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No one can escape from the sanatorium, while a superior power injects everyone with the virus of inactivity and acceptance of the problems that devastate the State. The silent, led by a group of non-conformist thinkers, decide to fight against the manipulated masses that embody the homogenization of ideas. That is, a mass of people afraid to rebel and all too willing to accuse the dissenting voices. The Sanatorium is an allegory of a sick civilization, devastated and fearful of the powers that only serve to accuse the other. It is a unique work in the tradition of the novels of ideas that reveal and intensify reality. Fiction made up of ideas and anger and in defense of the republic of letters, where we can hear the voices of Robert Walser, Marguerite Duras, Thomas Bernhard and Gustave Flaubert, among others.